lunes, 4 de febrero de 2013

Experiencia 101: Buscar la caricia más leve

Mi pareja, el viernes, me hizo una visita sorpresa a la salida del instituto. Fue un detalle precioso.
Después de comer, vio en mi escritorio el libro de 101 experiencias filosóficas de la vida cotidiana y comenzó a ojearlo con curiosidad. Tras comentar ambos algunas de las experiencias más curiosas, se fijó en una en concreto y dejó el libro a un lado.

Acercó sus dedos a mi rostro y comenzó a acariciarme muy levemente. Cerré los ojos y me concentré únicamente en sentir.
Sabía de qué se trataba. Era la experiencia 101 del libro, la última. Buscar la caricia más leve. La había leído esa misma mañana.

Quizá penséis que este tipo de caricia apenas se siente. Si es así, no os podéis hacer una idea de lo equivocados que estáis. A pesar de ser la más leve, os puedo asegurar que es la más sentida de todas.

Sentía sus dedos por mis mejillas, mi nariz, mis labios. No es una caricia continua. Es tan leve que, en ocasiones, sus dedos danzaban brevemente por el aire antes de sentirlos de nuevo. Algo así como si trazara por mi piel pequeñas líneas discontinuas.
Es una sensación preciosa. El autor del libro la describe como éxtasis inefable de efecto divino. (Inefable: que no se puede explicar con palabras). Y tiene toda la razón. Te eriza la piel, te hace sentir bien, te relaja, te enamora.







Es un cosquilleo, es placer, es parar el tiempo.





Si pudiera atribuirle cualquier adjetivo existente, diría que es un cosquilleo agudo (sin llegar a rozar un agudo excesivo, ya que pasaría de maravilloso a desagradable) y dulce. Es de color diamante. Es un Sol mayor en una guitarra. Un Sol mayor o un La mayor. Es eléctrico, es esponjoso, es suave, es natural. Pero lo más bonito es saber que era él quien me hacía sentir tan bien.

Me acarició también el cuello y los brazos y se me erizaba la piel del gusto.

Pero no todas las caricias han de ser obligatoriamente con los dedos. Al terminar el recorrido de nuevo en mi rostro, pasó a acariciar mis mejillas con sus labios. Y mi nariz. Y mis labios.

Abrí los ojos y le sonreí, feliz. Había dejado de ser un experimento, había pasado a ser algo más que una experiencia escrita en un libro. Ahora, era algo muy nuestro.

Posé mis dedos en su rostro y comencé a acariciarle casi imperceptiblemente. Cerró los ojos y me sentí feliz por estar haciéndole sentir así.

Mientras me dedicaba a acariciarle lo más suavemente posible sin llegar a separar mis dedos de su piel, me dediqué también a mirarle. Es muy lindo. Deseaba hacerle sentir esa calma, esa magia, esa chispa, esa sensación que él había provocado en mí.

Terminé tal y como él lo había hecho: rozando mis labios con los suyos.
Me besó. Lo besé. Y nos fundimos en un abrazo y en un suspiro.

Como he dicho, no podéis imaginar lo bonito y perfecto que es esto. Ha pasado a ser un momento muy nuestro que repetimos y repetiremos a menudo.
A pesar de ser la caricia más leve, es la más sentida y, probablemente, la más deseada.



9 comentarios:

  1. ¡Me ha encantado la entrada! Desde que empecé a leerla me ha ido gustando muchísimo; no dudaré en llevar a cabo la experiencia y espero que la sensación no sea muy diferente, porque parece maravillosa. Un beso :D

    ResponderEliminar
  2. Pensé en ti, María José cuando Zafra nos comento que teníamos que volver a comentar dos artículos de compañeros. ¿Porqué? Quizás por que anteriormente pude leer una entrada que tu misma escribiste sobre la música, una de tus primeras entradas, si mal no recuerdo ''Musicofilia'' En ella hablabas un poco de la síntesis del libro, pero al final explicaste tu experiencia con la música y añadiste un tema de Pink Floyd, que me gustaba realmente, por eso me he vuelto a dirigir a ti, porque sabía que me ibas a volver a sorprender.

    Me gustaría que supieras que yo también iba a escoger esta experiencia. También tengo pareja y sabía que probar esta experiencia con él, haría que me sintiese especial y única. Pienso que no hay nada más hermoso como una leve caricia al igual que un simple abrazo. Dos grandes placeres en mi opinión. Aunque finalmente me decante por la experiencia de ''Sentirse eterno'', la cual te recomiendo. Es realmente UNA EXPERIENCIA. Sientes que tu cuerpo y mente se encuentran separados, que tu cuerpo sigue ahí en tu cama, pero que tu mente se ha podido escapar y el tiempo no importa, increíble. Aunque si quieres saber un poco más, te invito a que pases por mi blog, siempre que quieras.

    Me encanta tu forma de describir una caricia '' Es de color diamante. Es un Sol mayor en una guitarra. Un Sol mayor o un La mayor. Es eléctrico, es esponjoso, es suave, es natural. Pero lo más bonito es saber que era él quien me hacía sentir tan bien.''

    Es más me gustaría decirte que mientras que leía, me sentía confundida, no sabía si estaba leyendo algo escrito por ti, o un fragmento de una novela romántica...

    No hay nada mas bello que el sentirse querido o amado por otra persona, todo el mundo debería sentirse así alguna vez, todo el mundo, ¡¡hagamos del 14 de Febrero, todos los días del año!!

    ResponderEliminar
  3. Realmente no sé como describir el nivel de satisfacción con esta experiencia.
    Me ha encantado el como ha expresado cómo se ha sentido cuando su pareja la acariciaba, el como ha ido recorriendo cada parte de su cara, y el como se le han puesto los bellos de punta, al igual que a mi a medida que he leído esta experiencia.
    La verdad es que yo puedo decir, que lo que más me gustan son las caricias, además de abrazos y besos, eso por supuesto. Pero yo opino, que no hay una cosa más tierna y bonita que una caricia.
    A mi una caricia me trasmite confianza y amor, ya que el que te la esta haciendo, siente algo especial por ti.
    Yo creo que la sensación de estar enamorado es la sensación más bonita que existe. Una de las señales por las cual yo puedo ver si lo estoy, es la persona que tengo en la cabeza ahora mismo a la vez que estoy escribiendo, llamadlo señal, pero en mi opinión, no hay cosa más bonita, que sentirse querido por una persona que daría lo que fuese por verte con una sonrisa en la cara.
    Me ha encantado esta experiencia, ya que yo la he experimentado muchas veces pero jamás me dió por pararme a pensar en lo que sentía cuando lo hacían.

    ResponderEliminar
  4. Me a parecido increíble esta entrada María José, enhorabuena, ya quisiéramos más de una saber expresar así el sentimiento que se siente cuando esa persona especial tan solo te roza...
    Yo he sentido esa sensación durante tres años de mi vida y es increíble, creía que no se podía explicar, pero lo has hecho perfecto, se me han puesto hasta los bellos de punta.
    Opino que no hay nada más bonito que amar y ser correspondido, poder ver a esa persona feliz ya te hace feliz, y que esa persona sea cariñosa contigo ya es perfecto.
    Cuando he experimentado esta experiencia e sentido que solo eramos uno, él y yo, unidos en una fusión, como si nada más importase en el mundo, como si no existiera nadie más.

    ResponderEliminar
  5. Ni mucho menos me ha dado tiempo a leer todas las experiencias que tanto los alumnos de 1 y 2 de Bachillerato han realizado, pero teniendo en cuenta ciertas recomendaciones me aventuré a inmiscuirme en tu experiencia para poder comprobar de primera mano si lo que llegaba a mis oídos sería capaz de llegar a mi corazón, y así ha sido. Desde mi punto de vista y basándome sobre todos en las sensaciones que han provocado en mí tu artículo me atrevo a decir que seguramente sea el mejor escrito del número 4º de la Revista Caótica sin duda alguna. Combinas de manera excelente una rica y variada escritura con la capacidad de plasmar sentimientos mientras escribes algo que es realmente difícil y que se encuentra al alcance de muy pocos. Te felicito por ello y mantén la línea que el camino por el que andas es el correcto !!

    ResponderEliminar
  6. Ni mucho menos me ha dado tiempo a leer todas las experiencias que tanto los alumnos de 1 y 2 de Bachillerato han realizado, pero teniendo en cuenta ciertas recomendaciones me aventuré a inmiscuirme en tu experiencia para poder comprobar de primera mano si lo que llegaba a mis oídos sería capaz de llegar a mi corazón, y así ha sido. Desde mi punto de vista y basándome sobre todos en las sensaciones que han provocado en mí tu artículo me atrevo a decir que seguramente sea el mejor escrito del número 4º de la Revista Caótica sin duda alguna. Combinas de manera excelente una rica y variada escritura con la capacidad de plasmar sentimientos mientras escribes algo que es realmente difícil y que se encuentra al alcance de muy pocos. Te felicito por ello y mantén la línea que el camino por el que andas es el correcto !!

    ResponderEliminar
  7. He de decir que cuando leí el título de la experiencia pensé que era una de las más difíciles de expresar, porque como todos sabemos los sentimientos son algo que no podemos describir con palabras. Por eso me he decidido a comentar aquí, en esta entrada, después de leer las que más interesantes me parecían.

    Me ha sorprendido mucho la capacidad que tienes de describir tan detalladamente algo tan íntimo, algo que yo y muchas personas consideramos difícil. También tengo que decir que me parecía muy cursi y atrevido escribir algo tan personal en un blog, a la vista de todos. Sin embargo me has dejado sin palabras y has cambiado totalmente mi opinión, es increíble tu forma de escribir.

    ResponderEliminar
  8. He elegido hacer un comentario en esta experiencia porque estoy totalmente de acuerdo como lo describe su autora, me imagino que no es la única que ha decidido realizar esta experiencia, pero me gusta como redacta y sobre todo me gusta mucho su blog, por eso decidí hacer el comentario sobre su experiencia en concreto.
    Pienso que es una experiencia que no le hace daño a nadie, ni molestar como podría ocurrir en la experiencia de '' telefonear al azar'', pienso que el tiempo que dure esta experiencia es lo de menos ya que si el que realiza la experiencia, la realiza con una persona que realmente quiere y se siente a gusto con ella cuando el tiempo de esta experiencia se acabase ambos tendrían ganas de pasar más tiempo entre caricias que es en lo que consiste esta experiencia.
    No leí 101 títulos de experiencias para acabar eligiendo este, simplemente me fije en este porque es necesario la compañía de alguien cercano, alguien querido y porque no solemos darle mucha importancias a las caricias, cuando nos hacen una caricia nos la tomamos como una caricia más sin fijarnos en lo que tiene de nuevo esa caricia, si lo pensamos bien no todas las caricias pueden ser iguales, un día puede tener sabor a tristeza y otro día sabor a alegría. Finalmente este artículo sobre este experiencia me ha hecho pensar en algo que no me había parado a pensar antes, en algo que no le daba mayor importancia y ahora se la doy, nunca se sabe si esa ''caricia sin importancia'' o la '' misma caricia de ayer'' puede ser la última.

    ResponderEliminar
  9. Qué cosa tan boniiiiiiiita de artículo, enserio! Me he puesto a leer varios al azar, indecisa, pero la decisión ha sido instantánea al leer ''éxtasis inefable de efecto divino''. Sin saber exactamente qué significa esa definición, puedo decir que me llama muchísimo la atención y me parece mágica.
    Creo que sé de que hablas al describir esa sensación producida por las caricias leves y esque no hace falta sentir mucho físicamente para llegar a sentir de verdad.
    Creo que no hace falta que te diga que redactas de manera que haces que la persona que te lee se sienta en tu piel, deberías aprovechar esa habilidad, a mi (y a muchos más por lo que veo) nos encanta leerte! :)

    ResponderEliminar

Filosófame como tú solo sabes.